La pereza en el eneatipo 9 conservación, se manifiesta como apatía, descuido y abandono de sí mismos. No se sienten importantes ni con derecho o valor para recibir amor, y suplen el sinsentido que experimentan ante la falta de éste y el vacío de ser, con una actitud resignada ante la vida (siendo su resignación una de sus características más prominentes) y un deseo exacerbado no sólo de comida o bebida, sino también de saber o de objetos materiales que les permitan colmar su vacío y olvidarse de sí mismos, sustituyendo el ser por el tener, y llenando su tiempo con pequeñas actividades de tipo hogareño o de consumo que los mantengan activos y distraídos, y lejos de su propio ser.
No se ocupan de sus necesidades e intereses, no tienen en cuenta sus emociones genuinas, no piden, se olvidan de proyectos de gran envergadura, y viven como anestesiados a través de una gran cantidad de estímulos externos que les obstruyen su conciencia y les permiten evadirse de la incomodidad y el sufrimiento que experimentan en su interior, pudiendo llegar incluso a convertirse en consumidores compulsivos que compran y acumulan objetos, o a descuidar su salud y a enfermar por dejadez, por problemas de obesidad o con la bebida.
Los eneatipo 9 conservación, suelen ser personas muy amorosas, alegres y tiernas, pero que no tienen la sensación de ser amadas, y que resignadas, se centran en buscar la comodidad en todo lo que hacen, con su propio ritmo, filosofía y manera de hacer las cosas, y priorizando mantener un estado de relajación interior, evitando todo lo que se lo pueda alterar. Se conforman con cosas básicas y concretas, con un estilo de vida primario basado en la comodidad, la seguridad y el placer, y procuran alejarse de los problemas y resistirse a cualquier cambio que pueda alterar su estado de bienestar, reduciendo sus expectativas de vida para no sentirse decepcionados, y resignándose incluso a vivir sin amor (o aparentando ser menos inteligentes de lo que realmente son para que en su voluntad de construirse una vida fácil, sean menos exigidos por los demás).
Los eneatipo 9 conservación, son los más fuertes de los tres subtipos del E9 y los más propensos a pasar tiempo a solas, los que menos se dejan llevar por el parecer o la voluntad de otras personas (aunque les es difícil decir que no a los demás), y los que mayor contacto tienen con sus necesidades. Simples y concretos (aunque rudos y de carácter más irritable y confrontativo que los otros dos subtipos), desde fuera se les ve como personas contentas aunque resignadas, que difícilmente se enfadan con alguien o sacan su rabia, pero que pueden reaccionar oponiéndose de forma muy tozuda cuando se les presiona o exige que cambien una conducta, o manifestar explosiones de rabia si se enfadan mucho tras haber tragado y soportado en exceso un abuso por parte de los demás ante su carácter bonachón y tolerante (aunque es raro que lo hagan).
En un estado de equilibrio respecto a su neura, saben afrontar los problemas y son capaces incluso de confrontarse con aquellos que se quieren aprovechar de su bondad, y acostumbran a saber lo que quieren de la vida, procurando alcanzarlo sin distraerse. Pero presas de su neura, no saben dar salida a sus auténticas necesidades, ni suelen ser conscientes siquiera de tenerlas, o adoptan el camino más fácil y a corto plazo a fin de mantener una vida cómoda y una mente tranquila, tratando de satisfacer su día a día mediante pequeñas acciones de consumo, y poniéndose nerviosos si algo les perturba su adormilado estado anímico.